La microdermoabrasión es un tratamiento de medicina estética que consiste en aplicar unos granos muy pequeñas que alcanzan a exfoliar y eliminar las células muertas de la piel, combinando dos técnicas: mediante puntas de diamante y con microcristales de óxido de aluminio.
Este tratamiento hace que la piel cambien y surja una renovada más bella, con un cuidado especial y sana. También es adecuado para combatir las estrías, cicatrices, manchas; como eliminar puntos negros. Otro punto a favor con este procedimiento, es que mejora la circulación de la sangre y las células renovadas hacen que la piel tenga un aspecto mucho más bonito, más luminoso, firme y uniforme.
¿En qué tiempo se puede realizar este tratamiento?
Se puede realizar en cualquier época del año, una vez concluido el verano para resistir a los estragos que la exposición al sol, o el exceso de calor ha causado en tu piel; en invierno si deseas lucir un cutis espléndido en un evento al que deseas acudir, también puedes hacerlo, ya que por ser una técnica indolora y que no necesita recuperación; en cualquier momento será bueno para rejuvenecer el aspecto de tu piel.
Nuestros profesionales de IsaMarí Beauty Center antes de realizar el procedimiento, lavamos muy bien el rostro o aquella zona de la piel en que se va a llevar a cabo el tratamiento. Es de suma importancia la eliminación de cualquier resto de maquillaje que pueda haber en la superficie de la piel, así como de toda la suciedad. De este modo, se evitan infecciones o posibles irritaciones.
También para nosotros es importante que, tras la microdermoabrasión, emplear una crema calmante para aminorar molestias o el enrojecimiento de la piel y consentir de este modo, el tejido celular; ya que es posible experimentar una sensación muy parecida a la quemadura del sol y sequedad en la piel. Pero No hay que preocuparse, dado que es una reacción completamente normal. En algunos casos, incluso, puede haber una posterior descamación.
¿Qué tiempo puede durar el tratamiento?
Lo normal es que el tratamiento dure entre 35 y 40 minutos. La cantidad de sesiones y frecuencia, va a depender del tipo de piel y problema que sea necesario tratar; así que, por lo general, se suelen realizar entre cinco y doce sesiones, de dos a cuatro veces al mes.
El aparato que se emplea para la microdermoabrasión dispone de tres cabezales realizados con zafiro. Estos cabezales son intercambiables y cuentan con varios niveles de intensidad. Del mismo modo, poseen una función dual, es decir, por una parte realizan la exfoliación para la eliminación de la piel excesiva; y, por otra parte, llevan a cabo un masaje de aspiración a través del que se activa la circulación y se estimula la renovación de las células.
Los resultados finales van hacer sorprendentes y vale la pena sacar ese tiempo para ti, que te lo mereces.